¿Qué relación hay entre el pelo graso y la calvicie?
Si tu cabello tiende a engrasarse, no deberías preocuparte; la producción de grasa es normal y necesaria para una buena salud capilar. Pero, si se genera en exceso puede tener como consecuencia la alopecia, por eso es tan importante regular la grasa de nuestro cuero cabelludo.
¿Cómo es un pelo graso?
El cuero cabelludo es el responsable de producir grasa para lubricar el cabello, gracias a la actividad de las glándulas sebáceas. Cuando la cantidad de sebo es excesiva provoca que se engrase el cabello, lo que genera sensación de suciedad. Para evitarlo, lo importante es tener una adecuada higiene del cabello, no tanto la frecuencia del lavado. Para ello es clave el empleo del champú más ajustado a cada caso.
Hay que tener claro que la grasa es necesaria, pero empieza a ser un problema cuando se ensucia el pelo con demasiada frecuencia, pareciendo desaseado y apagado. También puede causar brillo en la piel de la cabeza y hasta la aparición de caspa grasa. Estas descamaciones unidas al sebo son muy visibles a simple vista, puesto que el exceso de grasa consigue además que queden adheridas al cabello y al propio cuero cabelludo.
En el peor de los casos, acaba por obstruir los folículos pilosos, lo que implica que no les lleguen los nutrientes y el oxígeno como necesitan.
¿Qué factores influyen en la producción de sebo?
Las causas del pelo graso pueden ser hereditarias. Pero hay otras circunstancias que afectan a la oleosidad del cuero cabelludo. Por ejemplo, los cambios hormonales causados por la adolescencia, el embarazo o la menopausia.
Una alimentación inadecuada también puede redundar en una piel y cabello grasos. Por tanto, es recomendable prestar especial atención a nuestra dieta, que debe ser baja en grasas e incluir frutas y verduras a diario. Asimismo, el estrés puede ser otro desencadenante, por lo que conviene mitigarlo en la medida de lo posible.
Otras causas que influyen en una excesiva producción de sebo pueden ser un cambio brusco en las condiciones ambientales, tocarse el cabello a menudo o jugar con él, aplicar productos inadecuados para el tipo de pelo o demasiados fijadores (laca, gomina, espuma), usar accesorios (sombreros, gorras) muy a menudo, etc.
Cuidar la higiene también es esencial, con lavados diarios, alternando la utilización de un champú nutritivo como el NutriPlus Insparya con un antigrasa como el NoGrease de Insparya.
Entonces, ¿hay relación entre el cabello graso y la alopecia?
Como decíamos antes, cuando los folículos se obstruyen, dejan de recibir correctamente su alimento. Esto provoca que se genere aún más sebo, por lo que se desencadena un ciclo que hay que romper.
Ten en cuenta que si la grasa debilita el folículo, el cabello se volverá más fino y quebradizo. Además, se detendrá la formación de nuevos cabellos. Todo esto tiene como consecuencia la aparición de la alopecia.
En los casos más severos se presenta la dermatitis seborreica. Esta afección puede derivar en alopecia, puesto que la acumulación de grasa obstruye por completo el folículo, además de estimular la producción de dihidrotestosterona (DHT), un andrógeno que influye en la caída. Pero no hay que alarmarse, porque la pérdida de pelo por esta causa se puede revertir si se pone remedio a tiempo para eliminar la inflamación y el picor.
¿Cómo regular el cabello graso?
Una correcta higiene es fundamental. Dedica tiempo a elegir un buen champú antigrasa, como el No Grease by Insparya. Con su uso habitual conseguirás librarte del exceso de grasa, oxigenarás el cabello y la piel y mantendrás a raya la dermatitis seborreica. Todo a través de una formulación con ingredientes naturales que cuidan tu cabello con mimo.
Además, te recomendamos que uses agua tibia en el lavado, evitando la fría. También reduce al máximo los productos para la fijación (laca, gomina, geles, etc.) porque contribuyen a ensuciar más el pelo.
Si tienes más dudas acerca de la relación entre el pelo graso y la calvicie, en Insparya te las aclararemos y te ayudaremos a regular el exceso de grasa para evitar que se transforme en caída del cabello.